Mi 2010

Una no se roba a las personas, las personas mueren de ganas de irse con una, que es distinto. Eso lo sé con una certeza casi diabólica. Y lo sé porque yo me robé a una persona y planeo quedármela.

Y lamento todo lo que destruimos con el pretexto de nuestras ganas, esa es una verdad que tal vez nadie crea, pero de verdad lo lamento; nunca quise romper cosas ajenas para conseguir las mías. Digan lo que digan, no me educaron para hacer ese tipo de jaladas. Sé que esta es otra cosa que nadie cree porque seguramente todas las personas que hacen algo parecido dicen lo mismo, pero en verdad me educaron distinto. Y no puedo decir que me arrepiento de ir contra toda mi crianza y contra todo lo que me trataron de meter por todos lados mi familia y la escuela de monjas, porque la verdad es que no me arrepiento ni poquito de haber dejado que él se muriera de ganas de irse conmigo. Lo que sí puedo decir, es que me hubiera gustado que fuera distinto.

Pero soy feliz. Ha sido una verdadera montaña rusa. Ha habido gritos, lágrimas, incluso en algún momento cachetadas y empujones, pero ha sido genial en su conjunto.

Y este 2010 me dio hasta con la cubeta; los primeros dos minutos del 1° de enero me intoxiqué, a las pocas horas me esguincé el pie... y así siguió todo el año... tengo dos vértebras desviadas que me dejaron en reposo por muchas semanas, una esofagitis grave, me ordenaron cirugía de vesícula, se murió un amigo... ha habido tantas cosas malas, pero también hubo una que otra cosa buena, entre ellas que me robé a una persona.

And we are going to Vegas, baby!