Tus besos



Cuando me envuelves la cara con tus dedos y la boca con tus labios, siento la barrera infranqueable del amor que nos protege, ese amor que no es de a ratos, que es bello y no lastima. Porque en un principio tus besos eran el territorio perfecto para alguien que no quería establecer un nexo con su alma y corazón y ahora debo darme cuenta que he hecho de tus labios el puerto de mis tormentas y el sol de mis días nublados.





He hecho de tus besos mi hogar, la patria que le había negado a mí espíritu y la paz de mi corazón.