Shrink


Mis terapias eran bonitas porque todo era muy superficial. Vamos, si me esfuerzo mucho por mantener mi vida lejos del conocimiento de mis personas, no veo por qué hacer una excepción con un terapeuta. La cosa es que por azares del destino mi terapia se está poniendo más real y menos divertida y creo que va siendo tiempo de cambiar de terapeuta...