A verdade

El amor no se pide ni se exige, mucho menos se suplica o se ruega. Lo mismo pasa con todas las expresiones de amor, desde los besos, las caricias y el respeto hasta la confianza, el sexo y los abrazos. No es distinto con los métodos de negociación. Eso es algo que de 1987 para acá ya debiste haber entendido, pero parece que nomás no te entra a la cabeza...

A veces es desesperante tratar de negociar con alguien y no encontrar por dónde empezar; es horible saber que una parte está en un rotundo sí mientras la otra está en un rotundo no. Pero siempre es maravilloso encontrar que el terreno común es el amor y de ahí partir.