Amantes
Aquí estoy de nuevo preguntandome si seguimos siendo amigos, seguimos siendo amantes y si seguimos siendo almas gemelas.
No, no, no, no es una nueva relación ¡carajo, qué fácil sería si lo fuera! Es la única relación seria que he tenido. Una relación basada en confianza y celos enfermizos, sinceridad y secretos ajenos, amor y destrucción ¿contradicción? Para nada, Francisco siempre fue y será el amor de mi vida adolescente, y hasta que termine la adolescencia podré decir si también es el amor de mi vida adulta.
Pero bueno, esa no es la cuestión, el punto es que cada que trato de rehacer mi vida sentimental aparece algún detalle de él "por arte de magia".
El punto es que llevo rato tirando la baba por otro, alguien que me gusta y parece que le gusto, a quien quiero y sé que me quiere (sólo que no sé de qué maldita manera me quiere), y alguien por el cual me encantaría arriesgarme, y estoy a punto de estallar de emociones cuando checo mi mail y ¡ahí está el maldito! Recitandome versos que me hacen humedecer el corazón, declarando amores que hacen temblar cada una de mis extremidades.
Y de repente vuelvo a caer, me vuelvo a hundir en torbellinos de emociones gélidas... y lo gozo.
Quisiera intentar algo con "el otro", aunque los dos sabemos que SIEMPRE seremos "el/la otra", sólo quiero compartir mi soledad...